Cada historia humana es el resultado de una intensa trayectoria. Y, cuando se trata de una empresa como la nuestra, es la consecuencia del esfuerzo, la dedicación y el compromiso adquirido por un conjunto de profesionales con grandes sueños, objetivos y empeños compartidos.
Llevamos 25 años formando parte de la historia de nuestros clientes y amigos, ofreciendo soluciones industriales y una profesionalidad del 100 % en soldadura.
Aquí seguimos, tras dos décadas y media dedicados a la distribución de una extensa gama de productos de soldadura y corte de inmejorable calidad.
Si a estos 25 años de actividad en ARASOL les añadimos los otros 25 que llevaba nuestro fundador trabajando en el sector, todavía nos sentimos más orgullosos —si cabe— de lo que estamos logrando. 50 años constituyen una larguísima trayectoria en este mundo de la metalurgia. Cinco décadas. Diez lustros de experiencia, preparación y aprendizaje continuados.
A lo largo de este tiempo hemos dado muchísimos pasos, tomado incontables decisiones y coleccionado un gran número de aciertos… y también de equivocaciones.
Llegar hasta aquí ha sido un camino duro, pero gracias a la ilusión del equipo humano que formamos hemos hecho realidad ese objetivo irrenunciable que siempre ha guiado nuestra actividad: satisfacer las necesidades del cliente. Y, para ello, hemos sabido adaptarnos a las exigencias que plantea este sector.
La colaboración de nuestros partners —Lincoln Electric, Binzel, Pema, Harris, Yaskawa, Tecna, Messer Cutting…—, algunos de ellos con más de 100 años de historia,
nos ha permitido disponer de un conocimiento muy valioso que hemos procurado transmitir a nuestros clientes.
La seriedad y la eficacia de nuestros suministros, junto con la calidad y el óptimo servicio, son las metas hacia las que dirigimos nuestra organización. Así, el soporte técnico y la calidad de nuestros profesionales nos permiten conectar y entender rápidamente a nuestros públicos.
El reto no acaba aquí: nos encontramos en un proceso de evolución constante. Una evolución positiva, imprescindible y permanente, para dar respuesta al mercado que, en buena lógica, también evoluciona. El reto consiste en seguir dando respuesta a las nuevas necesidades de cada uno de nuestros clientes. En cambiar una y otra vez para seguir siendo los mismos. En ser capaces de continuar siendo sus compañeros de viaje con el objetivo de ayudarlos a seguir llegando con éxito a su destino.
Como lo llevamos haciendo desde hace medio siglo.
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